domingo, 8 de mayo de 2011

Elogio de la imperfección, de Rita Levi-Montalcini


Título: Elogio de la imperfección
Autor: Rita Levi-Montalcini
Editorial: Tusquets


Rita Levi-Montalcini recibió el Premio Nobel de Medicina en los años 80 por su contribución al conocimiento del sistema nervioso, dicho de manera escueta. Este hecho nuclear, sonoro, admirable, especialmente en estos tiempos de fulgor del éxito y la fama, es curiosamente lo que menos destaca la autora de su biografía. Sólamente el tratamiento del suceso deja bien claro el carácter humilde, serio, trabajador y noble de la autora de este libro de memorias.

Habla de su infancia en el seno de una familia judía, aunque no ortodoxa sino más bien librepensadora, de sus erráticos inicios como estudiante universitaria, de la difícil supervivencia por su condición de judía en la Europa de los años 30 y 40,... Y de sus investigaciones: no diré que lo hace de modo ameno, porque no le haría justicia, sino que combina el rigor científico con la claridad expositiva. Y lo hace como si contara una aventura llena de casualidades, sin individualidades, como una carrera de avatares que lleva sorprendentemente a importantes descubrimientos. El testimonio de Rita Levi-Montalcini es ejemplar, de gran altura y belleza moral, agrandando su figura un poco más a través de la humildad más serena y clara que se pueda encontrar.

Me quedo con la última sentencia del libro, en el que expone con detalle la aventura científica que vivió declarando que "la imperfección, y no la perfección, es la base del humano obrar". Un excelente testimonio.

No hay comentarios: